El pasado 3 de febrero de 2016 el Pleno de la Sala Civil del Tribunal Supremo dictó una sentencia por la que se declara la nulidad de las órdenes de suscripción de acciones por parte de minoristas ya que se estima que el folleto de salida a Bolsa de Bankia contenía información que no reflejaba la situación económica real de la entidad.
En consecuencia, se afirma que hubo error en el consentimiento por parte de los adquirentes debido a las graves inexactitudes del folleto de la oferta pública.
La incorrección, la falta de veracidad y exactitud o los errores contables sobre los datos publicitados en la Oferta Pública de Suscripción (OPS), hace concluir que la información económica, financiera y contable divulgada al público suscriptor, resultó inexacta e incorrecta, en aspectos relevantes, primordiales y sustanciales como son los beneficios y las pérdidas de la sociedad emisora. Todo ello imposibilita la correcta formación de la voluntad de cientos de pequeños inversores que depositaron la confianza en sus entidades bancarias a fin invertir en un producto financiero seguro.
Para el Tribunal Supremo el nexo causal existente entre la grave inexactitud del folleto de la OPS y el error padecido por los demandantes (pequeños inversores) está suficientemente razonado en las sentencias recurridas, ya que, a diferencia de lo que sucede con inversores cualificados, éstos carecen de otros medios de obtener información sobre los datos económicos fundamentales para tomar la decisión de comprar las acciones.